La Casa Quinta

    Se encuentra en paralelo y afinidad con el signo de Leo, el Sol y el elemento fuego. En este sector solar el nativo puede expresar su auténtico Yo sin impedimentos, ser él mismo y hacer lo que le apetece, disfrutar del ocio y el tiempo libre. Por eso es la casa de las diversiones, los hobbies y las actividades lúdicas y placenteras.

   La tradición dice que ésta es la casa de los hijos, pero más exactamente es la de la creatividad, tanto en el sentido físico, de tener hijos, como en el artístico o científico. Así, por ejemplo, escribir un libro o componer una ópera también se relaciona cone ste sector y en general todo lo que constituye la vocación del nativo, aquellas actividades que realiza por placer. Ésa es la razón por la que grandes artistas tienen el Sol o a otros importantes planetas en ella.

   Nos informa sobre los hijos, la posibilidad de tenerlos o lo contrario. La Luna en esta casa hará a la persona fértil y además es probable que tenga hijas. Saturno, por el contrario, tiende a hacer a la persona estéril, pero si tiene hijos éstos serás de rasgos físicos o psíquicos saturninos. El Sol puede dar un solo hijo, pero de gran brillo y personalidad.

  A través de esta casa expresamos nuestra necesidad de ser importantes o reconocidos, de capitalizar la atención y que otros giren alrededor del nativo. La experiencia práctica confirma dicha atribución, y quienes tienen el Sol, la Luna, Júpiter o grandes conjunciones en este sector serán particularmente brillantes, siendo una posición habitual de estrellas de cine o cantantes famosos.

   Esta casa también rige el amor y el sexo, especialmente aquellos romances o aventuras que proporcionan placer, deleite y felicidad, engrandeciendo el Yo del nativo pero sin complicarle la vida. Se relaciona con la necesidad de ser amado. La presencia de planetas "maléficos" en ella (Marte y Saturno especialmente o a veces Urano o Plutón) dificultará o impedirá la felicidad sentimental del nativo, o hará que sus amores sean tormentosos y desgraciados.

  Finalmente, esta casa rige los juegos de azar y la posibilidad de obtener ganancias materiales importantes de este modo. Muchos ludópatas tienen esta casa destacada como afligida en su nacimiento -con planetas recibiendo aspectos tensos-. En cualquier caso, tanto el vivir un gran amor como el que nos toque la lotería serán, en ambos casos, asuntos relacionados con la casa quinta.