Visión budista de la Casa Segunda.

   La segunda casa representa la relación con el mundo material. En esencia, al haber establecido la personalidad, el individuo busca la acumulación de bienes materiales. Esto abarca la influencia astrológica sobre su lugar de residencia, muebles que utiliza, la ropa que lo viste y la manera en que administra su dinero y se gana la vida. Los planetas en esta casa significan las capacidades para el mundo material.

    Un astrólogo budista está en condiciones de aconsejar a quienes tienen planetas en la segunda casa para que se manejan con prudencia en el entorno físico. ¿Qué crean a su alrededor? Las personas con tal disposición planetaria podrían tener una tendencia natural a identificarse con objetos materiales; por tanto, es probable que necesiten estar alerta sobre los efectos que generan tales objetos en su vida. Cabe aquí reconsiderar el acopio de ciertos objetos que fomentan la vanidad y el orgullo. La actitud hacia esos objeteos acarrea desencanto. El número y el tipo de planetas en esta sección refleja qué clase de entorno físico se crea.

    La práctica budista se divide en seis perfecciones. Éstas abarcan áreas de desarrollo espiritual necesarias para obtener la iluminación. La primera perfección es la generosidad y se relaciona con la segunda casa. Si alguien tiene una fuerte presencia planetaria en esta casa, puede resultarle conveniente estudiar tal perfección. La generosidad implica compartir tanto objetos materiales como tiempo, energía y consejos.


    Aquí dejo un vídeo sobre las Seis Perfecciones o Paramitas.